Películas dirigidas por mujeres en Cannes

‘Una bella luz interior’ brinda una sofisticada mirada al amor y el mundo de las relaciones adultas, en uno de esos extraordinarios casos en que el público y la crítica aclaman una misma película. Juliette Binoche brilla (como siempre) en esta excelente comedia romántica, acreedora a un premio en el Festival de Cannes.

Merecidamente galardonada con el premio al mejor guion en el Festival de Cannes 2019, ‘Retrato de una mujer en llamas’ es un delicado drama que, a través de la mirada femenina de la cineasta francesa Céline Sciamma (‘La banda de las chicas’), deconstruye la relación del acto de mirar con el arte, el amor, y la manera en que concebimos al ser amado, todo enmarcado en un contexto de profunda sororidad para hacer frente a un machismo que puede percibirse en cualquier lado, incluso si no puede verse. Protagonizada por las siempre excelentes Adèle Haenel (‘Finalmente libres’) y Noémie Merlant (‘Curiosa’), la película también fue nominada al Globo de Oro y al BAFTA a Mejor película en lengua extranjera, y mereció el Premio César a mejor cinefotografía, entre otras nueve nominaciones.

Una fotografía magistral de David Chizallet e increíbles interpretaciones. Si bien lo que te mantiene enganchado en ‘Cinco Graças’ es su historia: cinco jóvenes hermanas que deben enfrentarse a una sociedad conservadora, empezando por la propia familia. El largometraje justifica los 24 premios internacionales que obtuvo, junto a la nominación al Oscar en la categoría de Película en Lengua Extranjera en 2016.

Un análisis que refleja la alta sensibilidad de su directora Mélanie Laurent hacia los conflictos propios de adolescentes: dolor, amistad, bullying y el amor. Crecer no es fácil y ‘Respire’ es capaz de esbozar un fiel retrato de esta etapa, lejos del cliché y ahondando en su complejidad.

Una película conmovedora que nos sitúa en la vida de un adolescente, interpretado por Rod Paradot en una actuación electrizante, durante un programa de reinserción social para adolescentes en riesgo de exclusión social. Una montaña rusa de sentimientos bajo la tutela de una juez de menores interpretada por una brillante Catherine Deneuve.

En una mañana de primavera Sentaro recibe una visita inesperada a su pequeña pastelería que le hará cuestionarse el rumbo de su vida y el significado de vivir. Este es un largometraje que nos lleva a reconocer la importancia de pertenecer a la sociedad, anhelar un bien común. Ganas de vivir en esta obra de la directora Naomi Kawase, que una vez más parece encontrarse en búsqueda de su propia identidad.

Una película delicada y sensible. La historia de una niña que fantasea con escapar del más largo y aburrido verano para lanzarse de cabeza a vivir su sueño, huyendo por un momento del sacrificado estilo de vida tradicional junto a su familia, granjeros apicultores. Todo bajo el prisma mágico de su directora, Alice Rohrwacher, que transforma intencionadamente a Monica Belucci en una radiante diosa de feminidad con el poder de materializar los sueños de la protagonista.

Con un elenco bien emparejado y en total sintonía la película trata temas como paternidad, feminismo, ambición y relaciones interpersonales entre otros asuntos. En una combinación de amor y drama el largometraje nos cautiva, e indudablemente, transmite su mensaje. Fue uno de los favoritos en los Oscars 2017 pero perdió la estatuilla en la categoría de película extranjera, que se acabó llevando el filmeiraní de Asghar Farhadi ‘El cliente’.

A medida que los meses pasan la voluntad de una mujer por obtener el divorcio de su marido parece poner en evidencia la frivolidad e incapacidad de su marido para dejarla ser feliz. Una historia real que se repite, mujeres que tratan de hallar protección religiosa, política o social, desamparadas ante la violencia de género a manos de sus despechados maridos. Como Viviane, la protagonista, existen muchas mujeres obligadas a vivir una vida que no quieren. Esta es tan sólo una de esas historias. El largometraje de los hermanos Elkabetz fue nominado a los Globos de Oro en 2014 como mejor película extranjera.

Cerramos con la película que rompió la sequía de Palmas de Oro para el género femenino. 'Titane', de la directora Julia Ducournau, es una mezcla de géneros tan atípica e impactante como ambiciosos son sus temas. Una mujer y asesina serial huye luego de cometer varios crímenes y quedar embarazada de un auto (leíste bien), haciéndose pasar por el hijo desaparecido hace décadas de un bombero. A partir de ahí, se desencadena una exploración de los límites del sexo, el género y la familia.