Drifting States (2005)
Drifting States
”Un hombre decide terminar la vida de su madre en coma y escapa a un remoto pueblo para crear una nueva vida.”
Disponible en casa
Tráiler
¿Por qué ver esta película?
Se trata del largometraje debut del cineasta experimental quebequense, Denis Côté, quien eventualmente logró reconocimiento en el circuito independiente por filmes como ‘Carcasas’ y ‘Our Private Lives’. Realizada con un presupuesto prácticamente inexistente, ‘Drifting States’ es más un experimento que una narración bien delineada, que parte de la premisa original de un hombre que termina con la vida de su madre enferma, para entregarse a la improvisación de su actor principal (Christian LeBlanc) junto a los habitantes reales del pequeño poblado de Radisson. Para algunos, el filme puede resultar tedioso, sin embargo se trata de un experimento curioso y arriesgado, sobre todo para un largometraje debut. Película ganadora del premio principal del Festival de Cine de Locarno.
Filmelier
Nuestras recomendaciones
Sinopsis de la película
Guiado por la misericordia, Christian decide terminar la vida de su madre, quien se encuentra en coma. Conflictuado por las implicaciones legales y éticas de su acto, él escapa al remoto pueblo de Radisson, al norte de Quebec, donde se crea una nueva vida.
Compartir
¿Quieres asistir algo diferente?
¡Asista a películas completas ahora mismo!
¡Dale play y sorpréndete!
Dónde ver?
Disponible en casa
Del mismo director
Our Private Lives
Del cineasta experimental quebequense Denis Côté (‘Les é États Nordiques’), ‘Our Private Lives’ es en la superficie un drama romántico con una estética austera. Sin embargo, esto es para colocar mayor énfasis en el desarrollo de los personajes y su intimidad, cuyas diferencias acaban por romper con la idealización para sacar a flote siniestros secretos. Esta película canadiense de culto es una breve pero interesante reflexión sobre la privacidad y, sobre todo, de las máscaras que forjamos para nosotros mismos en el mundo digital.
Carcasas
Para su cuarto largometraje, el director experimental quebequense Denis Côté (‘Our Private Lives’) creó una película a medio camino entre la ficción y el documental, eventualmente seleccionada para el Festival de Cine de Cannes en 2009. La docuficción de ‘Carcasas’ recae en un personaje de la vida real, Jean-Paul Colmor, para contar una historia con algunos elementos de verdad y varios otros ficticios, a partir de sus interacciones con un grupo de adolescentes discapacitados. La película es, al menos en parte, una invitación a reflexionar sobre lo poco que en verdad necesitamos para vivir, y lo mucho que desperdiciamos en nuestro estilo de vida convencional.
Bestiaire
El séptimo largometraje del cineasta experimental quebequense, Denis Côté (‘Drifting States’, ‘Carcasas’), que tuvo su estreno en el Festival de Cine de Sundance, y que fue proyectada en otros prestigiosos festivales como el de Berlín y el de Toronto. ‘Bestiario’ es un documental experimental y contemplativo, que a través de sus imágenes y un mínimo de palabras nos invita a reflexionar sobre la dicotomía entre humano y animal, en la que el primero suele proclamarse como amo y señor del segundo. ¿Ese es en verdad el orden natural de las cosas? El acercamiento de la película puede resultar desafiante, pero sin duda es una pregunta sobre la que vale la pena reflexionar.
Curling
Del cineasta experimental de origen quebequense, Denis Côté (‘Drifting States’, ‘Carcasas’), ‘Curling’ es un extraño drama familiar sobre un padre sobreprotector y su hija, que resalta su aparente banalidad y tedio con su fotografía naturalista, que con su ambigua trama crecientemente perturbadora nos transmite una sensación de intranquilidad. Un extraño misterio al estilo de ‘Fargo’ o incluso ‘Psicosis’ que se desenvuelve a fuego lento, lo que sin duda pondrá a prueba la paciencia de muchos. Película ganadora de los premios a mejor director y mejor actor en el Festival de Cine de Locarno 2010.
Drama
El secuestro del Papa
En El secuestro del Papa (Rapito), el cineasta italiano Marco Bellocchio se adentra en uno de los episodios más turbios y polémicos en la historia de la iglesia católica, el "caso Mortara". En 1851, cuando el niño judío Edgardo Mortara cae gravemente enfermo, su nana católica decide bautizarlo de emergencia. Sin embargo, la ley papal dicta que todo católico deberá ser criado como tal, así que el cardenal ordena que el niño sea recuperado y llevado a manos de la iglesia, contra los deseos de sus padres, que deciden pelear por él. La película narra un caso polémico que captó la atención del resto de Europa y de América, y narra con habilidad la lucha de intereses entre el poder menguante de la iglesia, los padres de Mortara, y la opinión pública, con consecuencias irreversibles para todas las partes.
Nuestro hogar
André Luiz, el protagonista, nos muestra el mundo que nos aguarda tras la muerte. En una ciudad próspera y futurista, llena de vida y actividad, y organizada de un modo ejemplar, los espíritus recién llegados pasan por fases de rehabilitación y de educación espiritual bajo el control de espíritus de mayor categoría.
20.000 especies de abejas
Cocó, de ocho años, no encaja en las expectativas del resto y no entiende por qué. Todos a su alrededor insisten en llamarle Aitor pero no se reconoce en ese nombre ni en la mirada de los demás. Su madre Ane, (Patricia López Arnaiz), sumida en una crisis profesional y sentimental, aprovechará las vacaciones para viajar con sus tres hijos a la casa materna, donde reside su madre Lita (Itziar Lazkano) y su tía Lourdes (Ane Gabarain), estrechamente ligada a la cría de abejas y la producción de miel. Este verano que cambiará sus vidas obligará a estas mujeres de tres generaciones muy distintas a enfrentarse a sus dudas y temores.
Nuestro hijo
Hay un personaje en Nuestro hijo (Our Son) que plantea una cuestión curiosa: la comunidad LGBTQIA+ ha luchado tanto por el derecho a casarse y formar familia, que parece un desperdicio que se divorcien "como todos los demás". De eso trata la triste historia de esta película, en la que Billy Porter y Luke Evans interpretan a un matrimonio gay que, con un hijo en común, deciden separarse y pelear por la custodia. Es el tipo de historia ya muy vista desde dramas como Kramer contra Kramer, pero esta película le añade necesarios matices contemporáneos y una humanidad muy aterrizada: sí, se ha peleado mucho por esos deseos. Pero al final, como todos, los miembros de la comunidad son tan humanos como nosotros, con virtudes y defectos, a los que Evans y Porter hacen honor con creces.
