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¿Por qué ver esta película?
Existen infinidad de películas de terror. ¿Pero cuántas películas son sobre el terror mismo? Skinamarink: el despertar del mal, largometraje debut de Kyle Edward Ball, es una propuesta experimental minimalista en lo narrativo: dos niños despiertan a mitad de la noche, no pueden encontrar a su padre y descubren que todas las ventanas y puertas de la casa han desaparecido, por lo que deciden refugiarse en la sala con caricaturas en video y juguetes. Sin embargo, parece ser que hay algo en la oscuridad que los acecha. Con esa premisa tan escueta, Ball no se enfoca tanto en contarnos una historia sino en construir una atmósfera de miedo primigenio: la duda de que algo brutal e incomprensible se oculta en la oscuridad del armario, al terminar la escalera o debajo de la cama. Por eso mismo, Skinamarink puede parecer repetitiva y hasta cansada, así que el experimento no es del todo exitoso. Sin embargo, una cosa es cierta: es toda una experiencia que te hará volver a sentirte como un niño, acurrucado en tu cama preguntándote si eso que ves en la pared es sólo una pared, o un monstruo preparado para acabar contigo. Lee más en nuestra crítica completa de Skinamarink.

Lalo Ortega
Editor de Filmelier
Dos niños se despiertan en medio de la noche y descubren que su padre no está, y que todas las ventanas y puertas de su casa han desaparecido. Al sentirse abandonados, deciden permanecer con sus juguetes y videos de dibujos animados en la sala. Pero, poco a poco, el entorno comienza a transformarse, y queda claro que algo los acecha.
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Terror

La maldición de Audrey
La maldición de Audrey (The Curse of Audrey Earnshaw) es una propuesta contemporánea de folk horror sobre una bella joven y su dominante madre, ocultistas que viven en secreto entre un pueblo devotamente protestante, y que son señaladas como brujas cuando una plaga desconocida comienza a asolar a los habitantes. A pesar de cierta dispersión narrativa, las actuaciones y una atmósfera genuinamente atemorizante hacen de ésta una propuesta de terror con medios modestos, pero que dejará encantados a los fans del género.

Boogeyman: tu miedo es real
Dirigida por Rob Savage (de la excelente Ten cuidado a quién llamas) Boogeyman: Tu miedo es real (The Boogeyman) es otra película que se vale de un monstruo para hablar sobre una familia en duelo. Will Harper (Chris Messina) es padre de dos niñas, la pequeña Sawyer (Vivien Lyra Blair) y la independiente Sadie (Sophie Thatcher). Y no están en el mejor momento de sus vidas: su madre acaba de morir y los días de la familia se han vuelto sombríos. Es ahí donde el monstruo, que no es otra cosa que una criatura folclórica que personifica el miedo, surge. Está en la oscuridad, en el armario de la habitación, en el rincón húmedo de la pared. Los primeros 20 o 25 minutos de Boogeyman son desesperantes: Savage demuestra tener dominio de la cámara y del ambiente, dando miedo en cada giro, en cada luz que se apaga, en cada momento que Sawyer decide echar un vistazo debajo de la cama. Luego, termina convirtiéndose en una especie de Babadook genérica, sin mucha vida. Pero aún así, puede ser una divertida película de terror que, al verla entre amigos, puede generar sustos y risas.

Demonio negro
Durante un viaje a Bahía Azul, el trabajador petrolero Paul Sturges se encuentra varado junto con su familia en una plataforma donde los pecados de su pasado lo han puesto a él y a todo lo que ama, en la mira de una fuerza siniestra que surge de las profundidades, un enorme megalodón mejor conocido como el Demonio Negro.

Tin y Tina
Largometraje debut del director español Rubin Stein, que ya había realizado un cortometraje del mismo título y temática. Tin y Tina es un thriller de terror con macabros tintes de comedia, que comienza con el trágico aborto espontáneo que sufre Lola (Milena Smit, Madres paralelas) el día de su boda. Habiendo perdido su fe, intenta recuperarla asistiendo con su marido (Jaime Lorente, Élite) a un convento, donde acaban adoptando a dos encantadores gemelos. Sin embargo, la educación ultra religiosa de los niños se convierte en peligrosos juegos que llevan a la pareja por una espiral destructiva. Tin y Tina es una película que, oscilando entre el terror y la sátira, pone de manifiesto las contradicciones de ideas como el pecado y la bondad, en las interpretaciones simplonas y fanáticas de la religión.
