Tráiler
¿Por qué ver esta película?
Hilary (Olivia Colman) es la dedicada gerente de un cine en una ciudad costera inglesa a principios de los años 80. En ese momento, los cines comenzaban a experimentar una transformación, dejando atrás esas grandes e imponentes salas y buscando cada vez más un nuevo público. El personaje, por lo tanto, está en este momento de cambio, donde todo es incierto. Y aunque esto sea una de las cosas que más llaman la atención en Imperio de luz (Empire of Light), nominada al Oscar por la hermosa fotografía de Roger Deakins, no es este el punto principal. Lo que mueve la trama es la salud mental de la protagonista, que vive una cierta inestabilidad y no puede lidiar tan bien con sus emociones, especialmente después de desarrollar una relación con el nuevo empleado, Stephen (Micheal Ward). El director de la película, Sam Mendes (1917), es más conocido por su precisión técnica que por buenas historias, por lo que no es sorprendente que falte un poco de corazón en Imperio de luz, así como cierto conocimiento en temas que deberían ser más profundizados, como la salud mental de Hilary y el racismo sufrido por Stephen. Aún así, es fácil emocionarnos con la trayectoria del personaje, brillantemente interpretado por Colman (La favorita), que se entrega al personaje con una intensidad silenciosa que llama la atención en la pantalla grande.

Matheus Mans
Editor de Filmelier
Una poderosa historia sobre el amor y la conexión humana en medio de tiempos turbulentos, situada en un viejo cine costero de Inglaterra en los 80.
Compartir
¿Quieres asistir algo diferente?
¡Asista a películas completas ahora mismo!
¡Dale play y sorpréndete!
Dónde ver?
Disponible en casa
Del mismo director

Camino a la perdición
Del director Sam Mendes (‘Belleza americana’), ‘Camino a la perdición’ está basada en la novela gráfica homónima. Es atípica dentro del cine de gánsteres, con la relación de un padre y su joven hijo en el centro de la violenta narrativa. Incluso si la historia no te atrae, vale la pena su reparto de lujo, con Tom Hanks, Jennifer Jason Leigh, el legendario Paul Newman, Jude Law y Daniel Craig.

007: Operación Skyfall
Como la tercera entrega protagonizada por Daniel Craig, ‘007: Operación Skyfall’ (o sólo ‘Skyfall’) fue un gran paso para la saga cinematográfica de James Bond, que tuvo un serio incremento de caché con la contribución de Sam Mendes (‘Belleza americana’, ‘Camino a la perdición’) como director, un temazo digno de Oscar escrito e interpretado por Adele, la integración de Ralph Fiennes como Gareth Mallory y de Javier Bardem como el memorable villano Raoul Silva; y el regreso de ambos Q y Moneypenny, respectivamente interpretados por Ben Whishaw (‘El Perfume: Historia de un asesino’) y la gran Naomie Harris (‘Exterminio’). El resultado es la que se considera la mejor película de la era Craig y una de las mejores de la franquicia entera, sin mencionar que es la más exitosa de todas en la taquilla mundial – estrenada a tiempo para su aniversario cincuenta –. Finalmente, esta entrega marca la despedida de la gran Judi Dench en el papel de M, la única mujer que ha encarnado a la cabeza de la MI6.

Spectre
El cineasta Sam Mendes continuó como director de ‘Spectre’ luego del enorme éxito de ‘007: Operación Skyfall’, y con ‘Spectre’ entregó una sólida película de acción que, siendo sinceros, no logró replicar la frescura e intensidad de su predecesora, en buena medida gracias a un guion repetitivo y a un Bond realista, violento y cínico que con esta película comenzó a sentirse como una fórmula gastada. Tiene varios puntos favorables, como la fotografía de Hoyte van Hoytema (‘Interestelar’), así como el debut en forma de Ralph Fiennes en el rol de M, y la integración al elenco de grandes nombres como Léa Seydoux (‘La vida de Adèle’), Monica Bellucci (‘Irreversible’) y Dave Bautista (‘Guardianes de la Galaxia’) como un imponente matón. Mención aparte para el gran Christoph Waltz (‘Bastardos sin gloria’), quien encarna al icónico archienemigo de James Bond, Ernst Stavro Blofeld, en su primera aparición (así como de su organización, S.P.E.C.T.R.E.) dentro de la continuidad de la era Craig. La película también marcó un curioso hito para los fans mexicanos, pues la secuencia inicial sucede en la Ciudad de México durante un desfile del Día de muertos, una tradición anteriormente inexistente en el país y que se lleva a cabo anualmente después de la filmación.

Belleza Americana
Dirigida por Sam Mendes y ganadora de cinco premios Óscar (mejor película, mejor guión, mejor fotografía, mejor director y mejor actor), ‘Belleza americana’ es una obra maestra del cine estadounidense. Está repleta de simbolismo para representar, al puro estilo lynchiano, las paradojas de la cultura suburbana americana: el conformismo, la represión, y el culto a la juventud y la belleza (o por lo menos a las apariencias). Se le consideró la mejor película en su año de estreno y, a la fecha, permanece como una de las más icónicas de los últimos veinte años.

1917
El director Sam Mendes (conocido por ‘Belleza americana’ y ‘Skyfall’) se inspiró en historias contadas por su abuelo, Alfred Mendes, para contar el viaje de dos soldados británicos que deben cruzar el frente alemán en plena Primera Guerra Mundial, con la misión de entregar un importante mensaje a un general aliado. Todo el largometraje está formado de largas tomas de aproximadamente ocho minutos de duración, dando al espectador la impresión de un enorme plano secuencia (casi) ininterrumpido (tal como hizo Alfred Hitchcock con ‘La soga’). Aunque no sucede exactamente en tiempo real, esto proporciona una profunda sensación de realidad, lo que nos hace entrar de lleno en su impactante y amarga historia. La película es un logro mayor en cuanto a fotografía (a cargo del legendario Roger Deakins), y cuenta con un elenco de grandes actores británicos, que incluye a nombres de la talla de Andrew Scott, Benedict Cumberbatch, Colin Firth y Mark Strong, entre otros. Pero quienes se llevan las palmas son los dos actores protagonistas, Dean-Charles Chapman (‘Game of Thrones’) y George MacKay (‘Capitán Fantástico’). Una gran experiencia cinematográfica que debe verse en la forma más inmersiva posible, sin potenciales interrupciones.
Drama

Hijo de monarcas
Tras la muerte de su abuela, un biólogo mexicano que vive en Nueva York regresa a su pueblo natal, enclavado en los majestuosos bosques de mariposas monarcas de Michoacán. El viaje lo obliga a enfrentarse a los traumas del pasado y a reflexionar sobre su identidad híbrida, provocando una metamorfosis personal y espiritual.

Unclenching the Fists
En una pequeña ciudad minera en Osetia del Norte, Rusia, una joven mujer se siente sofocada por su familia, viviendo entre rechazo y amor: una vida complicada, por decir lo menos. A partir de ahí, la joven Ada (Milana Aguzarova) comienza a planear su tan esperado escape. Dirigida por la rusa Kira Kovalenko, Unclenching the Fists ganó el principal premio en la sección Una cierta mirada del Festival de Cannes, y ofrece una visión perspicaz sobre la sociedad rusa, principalmente en lo que concierne a las mujeres de la región.

Tesla: El hombre eléctrico
De la misma manera que Nikola Tesla reinventó la relación del ser humano con la electricidad, esta biopic igualmente de manera muy singular trata de reinventar el género de la mano de Ethan Hawke (Antes del amanecer) como Tesla y Kyle MacLachlan (Twin Peaks) como Tomas A. Edison. Tesla es una película muy intrigante y nada convencional.

La última función de cine
Del director Pan Nalin (Samsara), La última función de cine es una película semi-autobiográfica que, por su pura premisa, recuerda de inmediato al clásico del cine italiano, Cinema Paradiso. La historia sigue a un pequeño niño de la India rural, Samay (Bhavin Rabari), quien va al cine por primera vez y acaba enamorándose de él. Contra los deseos de su padre, decide escaparse de la escuela y volver al cine una y otra vez, donde se hace amigo del proyeccionista y aprende más sobre hacer películas. Él y sus amigos deciden intentar aprender sobre la luz para proyectar películas, pero poco a poco, Samay se da cuenta de que seguir su sueño significa dejar atrás lo que ama. Entre la nostalgia infantil por descubrir algo que amas por primera vez, además de infinidad de referencias a cineastas como Tarkovski y Malick, La última función de cine es una oda al acto de crecer y aprender, con un sutil comentario sobre la supuesta naturaleza del cine como un arte accesible para todos.
