Con ‘Agente Fortune: el gran engaño’, Guy Ritchie juega con el cine de espías

Incluso si se trata de un cineasta con diferentes facetas y estilos, podríamos decir que las películas de Guy Ritchie son bastante reconocibles. Desde Snatch: cerdos y diamantes a Juegos, trampas y dos armas humeantes, hasta llegar a Agente Fortune: el gran engaño (Operation Fortune), estreno en cines de la pasadas semanas, hay mucha similitud en el cine del británico. Historias rápidas, con giros que juegan con el sentido de dirección y de comprensión de los espectadores.

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La trama trata sobre el espía Orson Fortune (Jason Statham), quien debe rastrear y detener la venta de una nueva tecnología de armas mortales realizada por el billonario Greg Simmons (Hugh Grant). Junto con uno de los mejores equipos de operaciones especiales del mundo, incluyendo a Sarah Fidel (Aubrey Plaza), Fortune recluta a la estrella de Hollywood, Danny Francesco (Josh Hartnett) para ayudarlos a pasar desapercibidos en la misión de salvar al mundo y robar a Simmonds.

Todo eso, como dice Guy Ritchie en entrevista, nació rápidamente. El cineasta detalla que se sumergió en el cine de espías y, entonces, encontró el tono de su nuevo largometraje. “Tuve una idea para una película de espías hace unos 8 meses atrás, puede que más. No recuerdo. Y para la premisa, vimos todas las películas de acción de espías que pudimos y trabajamos en la trama”, dice Ritchie sobre la concepción de su película con un cargado acento británico.

Eso da para entender un poco cómo surgió la película y, principalmente, cuáles son los objetivos del cineasta con la producción. Más que crear una historia original, el británico busca aquí traer todos los elementos que funcionan en el cine de agentes especiales, como las tramas fantasiosas, la acción desenfrenada y personajes que parecen perdidos, pero que lo resuelven todo en el último segundo. Algo ya visto incluso en El agente de C.I.P.O.L. o en Justicia implacable, ambas también de Ritchie.

Agente Fortune es ritmo, ritmo, ritmo

En la entrevista, Guy Ritchie deja claro que, lo que más le importó a la hora del rodaje, fue el ritmo. Para nosotros, de este lado de la pantalla, es algo perceptible. Es una película mucho más movida que La gran estafa, por ejemplo, que de por sí tiene un ritmo acelerado debido a su trama llena de giros y una edición que no para nunca. Con Agente Fortune, todo comienza desde la primera escena, que dicta el ritmo del resto.

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“Tan pronto como escribí la escena, ya sabía cuál sería el tono de la película, y me gustó. Entonces, tan pronto como lo escribí, ya sabía cuál sería el resto de la película”, explica Guy Ritchie, exaltando lo que él entiende como el punto central de su nueva película. “Muchas escenas y diálogos son sobre ritmo, sobre si ellos entienden el ritmo. Es una película rítmica. Inicialmente no había ritmo, era pura estructura. Pero luego de cinco minutos, te encuentras con que el ritmo del todo funciona”.

Agente Fortune: el gran engaño continúa en salas de cine de México. Para conocer más sobre la película y comprar boletos, entra aquí.

Publicado originalmente en la edición brasileña de Filmelier News.

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