‘Ella dijo’ aborda el caso Weinstein pero deja un mal sabor de boca ‘Ella dijo’ aborda el caso Weinstein pero deja un mal sabor de boca

‘Ella dijo’ aborda el caso Weinstein pero deja un mal sabor de boca

A pesar de sus aciertos al desmenuzar el caso de Harvey Weinstein, la falta de profundidad y el involucramiento de Brad Pitt debilitan a ‘Ella dijo’

Matheus Mans   |  
5 enero, 2023 11:16 AM
- Actualizado 10 enero, 2023 7:25 PM

Megan Twohey y Jodi Kantor. Puede que no conozcas esos nombres, pero con seguridad conocer la investigación que ellas comenzaron discretamente con The New York Times y que terminó revelando detalles sobre los abusos cometidos por el productor Harvey Weinstein, mandamás de Miramax. Ahora, esa historia eclipsada por el propio absurdo de Weinstein reclama los reflectores con Ella dijo (She Said), que se estrena hoy, 5 de enero, en salas de cine de México.

Dirigida por Maria Schrader (El hombre perfecto), la película se adentra en las vidas de Twohey (Carey Mulligan) y Kantor (Zoe Kazan), precisamente en el periodo en que investigan las primeras denuncias que salen a la luz sobre el pez gordo de Hollywood. Es esa misma esencia de lo visto en Todos los hombres del presidente y En primera plana, donde la investigación de algunos periodistas surge con el potencial para cambiarlo todo.

El guión de Ella dijo es más de lo mismo, a pesar de su fuerza

En términos narrativos, Schrader encuentra poco espacio para innovar. Sujeta al libro que originó toda la trama, escrito por la propia dupla de periodistas, la directora cae en la tradicional estructura de las historias sobre periodistas en investigación: encuentran fuentes, intentan convencer a esas personas de testificar en sus reportajes, se topan con pared. Y claro que no había forma de alejarse de ello: la historia, al final, se basa en hechos. Pero no quita que quede esa sensación de repetición.

Ella dijo
Mulligan y Kazan interpretan a las dos periodistas en la película (Crédito: Universal Pictures)

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Por ejemplo: durante sus dos primeros actos, Ella dijo básicamente camina en círculos, con las dos protagonistas buscando medios para levantar su reportaje. Hablan con una fuente, les cierran la puerta en la cara, se frustran y el ciclo inicia de nuevo. Es como si la película persiguiera su propia cola todo el tiempo. Es algo que no se ve con En primera plana, pues tiene más personajes.

Schrader, sin embargo, logra escapar un poco de esa estructura un tanto obvia al presentar vistazos a las vidas personales de sus protagonistas. Mientras están en la redacción del diario buscando el hilo negro de la historia, hay vida en sus casas. Twohey enfrenta los dramas del primer embarazo y de la depresión posparto. Kantor, mientras tanto, ya tiene dos hijas, pero acaba tan absorbida por las actividades del periódico y del caso Weinstein que se olvida de su vida en casa.

Esos dejos de humanidad de los personajes rompen un poco el patrón y acaban enriqueciendo una trama que, a pesar de tratar un caso de hace cinco años, parece envejecida de tanto que ya fue usada en el cine.

La fuerza del caso Weinstein es el alma de Ella dijo (a pesar de los créditos)

A pesar de esa estructura repetitiva y banal, Ella dijo encuentra su fuerza central en la propia historia que cuenta, en los detalles del caso Weinstein. Es poderoso, y muy fuerte, conocer cómo sucedieron los hechos de esa historia que cambió al mundo del cine. Llegan a dar escalofríos al ver los momentos en que la historia del antiguo y violento mandamás va siendo contada y su castillo de cartas comienza a desmoronarse.

Esto eleva a la película como un todo. Independientemente de su estructura banal, Ella dijo es esencialmente auténtica y potente como retrato de una estructura de poder que se perpetúa. No es tan impactante como La asistente, por ejemplo, donde vemos a ese poder imponiéndose sobre quienes no pueden defenderse. Pero, aún así, es difícil dejar la rabia y el rencor de lado conforme la historia se va revelando, más si pensamos que se ha extendido durante décadas.

Y a pesar de ser el punto fuerte de la película, elevándola a otro nivel, Ella dijo tiene dos problemas. El primero es la ausencia de otros nombres de peso en Hollywood que permitían los crímenes cometidos por Weinstein. La película se concentra en sólo dos de ellos, pero podría (y debería) haber hablado de que ese tipo de crímenes no suceden aislados. Muchas otras personas estaban involucradas.

Lo peor, sin embargo, viene cuando los créditos aparecen en pantalla. Después de todo lo que muestra la película, con mujeres luchando por transformar no sólo a Hollywood, sino la sociedad como un todo, Ella dijo da crédito a Brad Pitt como uno de los productores. ¿El problema? Que recientemente, el actor ha sido acusado de agredir a su exesposa, Angelina Jolie.

Y entonces viene el pensamiento: Weinstein fue a la cárcel, pero la ola de abusos continúa. Y queda la sensación amarga de que nada va a detener eso.

Ella dijo ya está en salas de cine mexicanas. Para saber más de la película y comprar boletos, entra aquí.

Publicado originalmente en la edición brasileña de Filmelier News.