Probablemente no estaríamos hablando de Tyrese Gibson hoy si no fuese por esta película. Lo curioso es que +Rápido +Furioso ni siquiera fue tan exitosa, al estar desprovista de casi todo el elenco de la muy bien recibida primera parte (salvo Paul Walker). Pero Gibson hizo de Roman Pearece un personaje tan carismático que la semilla quedó sembrada para su eventual regreso en la quinta entrega, que reinventó la saga y reunió a todos los personajes introducidos hasta entonces.
Aunque la "familia" comenzó a consolidarse en la quinta, fue en Rápidos y furiosos 6 donde Roman Pearce comenzó a establecer su lugar en la dinámica: el alivio cómico, a menudo en compañía de (o discutiendo con) Tej Parker (Ludacris). Y en ningún momento brilla más que en la alucinante persecución climática, donde se ve arrinconado en las situaciones más absurdas para mantenerse con vida.
La otra gran saga de acción en la que ha participado Gibson es en Transformers, en el rol del sargento Robert Epps, un aliado de los protagonistas que, en las secuelas, une fuerzas con los Autobots.
Tyrese Gibson ha diversificado su trabajo a otros proyectos de acción, compartiendo escena con otras estrellas del género, como Mel Gibson. En Instinto peligroso (Dangerous), él interpreta a un agente de policía a la caza de un presunto psicótapa reformado (Scott Eastwood) que investiga la verdad sobre la muerte de su hermano.
El actor también intentó dar el salto al muy lucrativo negocio del cine de superhéroes. Por desgracia, lo hizo en la malograda Morbius, spin-off del universo Spider-Man de Sony. Su papel hubiera podido ser mayor: interpreta a Simon Stroud, un agente del FBI que debe dar caza al "vampiro viviente" (Jared Leto), con ayuda de un brazo biónico (cuyas escenas, sin embargo, fueron eliminadas). En los cómics, el personaje es un mercenario que ha unido fuerzas con héroes como Spider-Man y Black Widow. Una pena...
