Cualquier buen padre iría hasta los confines del mundo por su hijo, y para el nervioso pez payaso Marlin, eso significa nadar por aguas continentales hasta Sídney. Colorida, tecnológicamente impactante para su tiempo y emotiva, ‘Buscando a Nemo’ es, en el fondo, una historia sobre un padre que tiene sus razones para ser sobreprotector, pero que debe aceptar la independencia de su hijo.
‘Tiburón’, el clásico de Steven Spielberg, es memorable por tantas razones que solemos olvidar que es protagonizada por quien no sólo es un policía ejemplar, sino uno de los mejores papás del cine. Cuando el escualo titular desata el terror en Amity Island, el jefe de policía Martin Brody hace a un lado su miedo al agua para lanzarse a cazarlo por el bien del pueblo – y de sus hijos –.
Para muchos padres, la peor pesadilla es que su hija quede embarazada en plena preparatoria. Mucho del encanto de ‘Juno’ está en que muestra que las cosas pueden ser de otra forma, y J. K. Simmons interpreta a uno de los mejores papás del cine en Mac MacGuff, quien de inmediato apoya la decisión de su hija de tener al bebé y darlo en adopción.
El clásico navideño de Hollywood por excelencia es, también, una historia de paternidad y legado familiar. ‘Qué bello es vivir’ ve a su protagonista, George Bailey (James Stewart), adaptarse a las circunstancias para asumir el negocio de su padre, del que dependen tantas personas. Sus sacrificios y abnegación acaban por pasarle factura pero, finalmente, descubre lo valiosa que es su vida por ayudar a otros y formar una familia.
Seguro, todos podemos tener nuestras opiniones sobre ‘Armageddon’, de Michael Bay. Pero si hay una película que ha afianzado la imagen de Bruce Willis como uno de los rostros más heroicos de Hollywood, es ésta. Nada como salvar a la Tierra entera de un meteorito y, de paso, sacrificarse para que su hija pueda disfrutar de la vida junto a su pareja.