Aunque Gaiman ya contaba con experiencia fílmica con la dirección de un cortometraje y la adaptación de un guión (escribió el guión para el doblaje de ‘La princesa Mononoke’), ‘La máscara de los sueños’ (o ‘MirrorMask’) es su primera incursión en un largometraje cuyo guión fue escrito completamente por él. Dirigido por Dave McKean (el ilustrador de su libro ‘Coraline’ años antes), cuenta la historia de una joven atrapada en un mundo de sueños, quien tendrá que recuperar una máscara mágica para volver a casa.
Aunque Neil Gaiman no dirigió ni escribió esta película, sí se basa en su exitosa novela homónima de fantasía. ‘Stardust - El misterio de la estrella’ cuenta la historia de Tristan, un joven del pequeño pueblo de Wall, quien cruza a una mágica dimensión paralela para recuperar una estrella fugaz y llevarla a la chica que ama. Sólo que la estrella es en realidad una mujer, perseguida por brujas, piratas y ambiciosos príncipes.
Junto con Roger Avary (quien colaboró con Quentin Tarantino en la historia de ‘Pulp Fiction’), Gaiman se dio a la difícil tarea de adaptar el poema épico ‘Beowulf’ a una película de alrededor de dos horas. La película fue, de hecho, criticada por su trama, pero el director Robert Zemeckis entregó una digna adición al cine de fantasía épica con grandes innovaciones en el campo de la animación y la captura de movimiento.
Una vez más, Gaiman no fue ni guionista ni director en esta ocasión, pero su trabajo en la novela ‘Coraline’ con Dave McKean sentó una base lo suficientemente sólida para que el director Henry Selick (‘El extraño mundo de Jack’) lograra una de las obras maestras del stop motion contemporáneo. ‘Coraline y la puerta secreta’ sigue a la protagonista homónima, una niña frustrada con sus padres y su nuevo hogar que encuentra refugio en una siniestra dimensión alterna.
Basada en el laureado cuento homónimo de Neil Gaiman, ‘Cómo enamorar a una chica punk’ (mejor conocida por su título original, ‘How to Talk to Girls at Parties’) tampoco es dirigida ni escrita por él, pero su mera premisa resulta lo suficientemente original. En los suburbios londinenses de los setenta, un joven amante del punk intenta colarse a una fiesta, pero se equivoca de casa. Ahí conoce a una chica con una peculiaridad: en realidad es una alienígena.
