El “peor retrete de Escocia” no puede faltar en una lista sobre los retretes más famosos del cine, y no es para menos: el surreal chapuzón de Renton para hallar su droga en la porquería, es una de las secuencias más icónicas de toda ‘Trainspotting’, de Danny Boyle, a su vez una de las películas clave de la década de los noventa.
Puede que los dinosaurios sean más inteligentes de lo que aparentan en ‘Jurassic Park’, pero claramente no entienden de privacidad. Por ello el tiranosaurio rex no tiene problema en perseguir a Ian Malcolm hasta los baños, donde se encuentra con Donald Gennaro “haciendo sus necesidades”. Aquí el retrete funcionó más como un plato para canapé.
‘Arma mortal 2’ tiene a uno de los retretes más famosos del cine por virtud de haber sido transformado en, bueno, un arma mortal. Cuando los detectives Riggs y Murtaugh investigan a diplomáticos sudafricanos sospechosos de actividades ilícitas, este último es víctima de un peculiar atentado: una bomba instalada debajo del inodoro que está utilizando. Entonces se despliega un operativo antiexplosivos a su alrededor, mientras Murtaugh sigue con los pantalones abajo.
Dato curioso: en ‘Pulp Fiction’, la segunda película de Quentin Tarantino, algo malo sucede cada vez que Vincent Vega decide ir al baño: en la primera que vemos, Mia Wallace inhala su heroína por accidente, y en la segunda (la última, en la cronología de la película), Butch le roba su arma, con mortales consecuencias. En la tercera – que es cuando en realidad vemos a Vincent sentado en el retrete –, “Pumpkin” y “Honey Bunny” deciden asaltar la cafetería donde desayuna con Jules. Sin duda le da un nuevo significado a la expresión “embarrarla”.
Sin duda la mención más seria – y escalofriante – de la lista, ‘Cara de guerra’ contribuye a la lista de los retretes más famosos del cine con hileras enteras de ellos. La escena en cuestión: cuando el soldado Pyle decide tomar un rifle, sentarse en el baño del campo de entrenamiento, y terminar con su vida. Es un momento clave del filme, en el que el protagonista enfrenta los horrores psicológicos de la guerra incluso desde antes de probar la batalla.