Un grupo de jóvenes entra a robar en una casa, solo para descubrir que en el sótano se encuentra una niña amarrada, supuestamente poseída por el demonio. El dilema moral y la presencia sobrenatural aumentan la tensión hasta el límite. Con un enfoque más tradicional al género de exorcismos, El habitante ofrece giros narrativos y una atmósfera siniestra. Es una de las películas terror mexicanas que mezcla horror religioso con crítica social contemporánea. Su ritmo ágil y su reparto joven la hacen ideal para quienes buscan una experiencia aterradora pero entretenida.
En un internado para señoritas, una estudiante rebelde comienza a tener visiones y experiencias paranormales relacionadas con un suicidio ocurrido años atrás. Lo que parecía un simple castigo escolar se transforma en una pesadilla. Con esta obra, Taboada redefinió el terror psicológico en México. La cinta es sutil, elegante y aterradora sin recurrir a sangre ni monstruos. Es una joya absoluta entre las películas terror mexicanas. Su remake en 2007 no logró el mismo impacto, pero la versión original sigue siendo un referente por su atmósfera inquietante y su narrativa envolvente.




