Desde Forrest Gump (1994), la colaboración entre Robert Zemeckis y Tom Hanks ha generado algunos de los momentos más emotivos en la historia del cine. La química entre director y actor es evidente en la forma en que Zemeckis desarrolla historias profundamente humanas con un toque de fantasía, y cómo Hanks aporta una autenticidad conmovedora a sus personajes.
En Aquí (2024), se reencuentran para otra historia emocionante, esta vez explorando el paso del tiempo dentro de un solo escenario.
Samuel L. Jackson se ha convertido en una pieza clave en el universo cinematográfico de Quentin Tarantino. Su primera gran colaboración llegó con Pulp Fiction (1994), donde su icónico Jules Winnfield se roba la escena con diálogos afilados y una presencia imponente.
Desde entonces, Jackson se ha convertido en uno de los rostros más frecuentes en las películas del director, como en Los Ocho Más Odiados (2015), donde asume el papel principal en un thriller western lleno de suspenso y traición.
Martin Scorsese ha construido colaboraciones duraderas tanto con Robert De Niro en las décadas de 1970 y 1980, como con Leonardo DiCaprio a partir de los 2000. Fue en Taxi Driver (1976) donde su relación con De Niro se consolidó, marcando el inicio de una larga asociación.