El esquema fenicio (The Phoenician Scheme) es la incursión del director Wes Anderson en la comedia de espionaje, específicamente, de carácter empresarial. La trama sigue a un empresario cínico y sin escrúpulos, Zsa-zsa Korda (un excelente Benicio del Toro), que luego de una larga cadena de atentados frustrados contra su vida, decide volver a entrar en contacto con su hija distanciada, Liesl (Mia Threapleton, hija de Kate Winslet) para nombrarla su heredera, a pesar de que es una monja. Cuando el gobierno estadounidense pone en marcha un complot para sabotear su mayor negocio, Korda y Liesl deben viajar por todo el territorio para convencer a sus socios de no retirar su inversión, evadiendo intentos de sabotaje y asesinato en el camino. Fuera de ser un género novedoso para Anderson, es una película que repite mucho de su estilo y temas, planteando una historia de un inadaptado en busca de conexión genuina. No va a cambiar de opinión a ningún fan ni detractor del cineasta, pero algo que sí es muy cierto es que el humor de Anderson está más refinado y preciso que nunca. Si eres fan de su filmografía, pasarás un rato increíble.
Después de El fantástico Sr. Zorro, el director Wes Anderson (Asteroid City) aborda una vez más una adaptación de Roald Dahl con La maravillosa historia de Henry Sugar (The Wonderful Story of Henry Sugar), un corto exclusivo de Netflix en el que el cineasta lleva al extremo todas las marcas de su característico estilo. El resultado es una genial pieza que juega con diversos niveles narrativos: la historia es contada por el propio Dahl (Ralph Fiennes), quien narra cómo el egocéntrico y excéntrico millonario Henry Sugar (Benedict Cumberbatch) descubre un cuaderno con las notas que un médico (Dev Patel) escribe sobre las experiencias de un místico de circo (Ben Kingsley), un hombre que aprendió a “ver sin usar los ojos”. Toda la idiosincrasia de Wes Anderson es llevada a sus últimas consecuencias en este cortometraje, así que no te hará cambiar de parecer si eres uno de sus detractores. Sin embargo, los fans disfrutarán un verdadero deleite en el que, además, el director plantea que el artificio de su cine no es impedimento para llegar a verdades profundas y conmovedoras con sus historias. Lee más en nuestra crítica de La maravillosa historia de Henry Sugar.
Asteroid City podría ser descrita como la película “más Wes Anderson” de Wes Anderson (Isla de perros, El gran hotel Budapest), en el sentido de que el director no sólo reafirma su estilo –con todos sus artificios–, sino que, desde el principio, se sabe autoconsciente de ellos. La historia aquí es enmarcada como una obra teatral sobre el remoto pueblito homónimo, donde se realiza una convención espacial para jóvenes de intelecto privilegiado, en la que suceden acontecimientos de implicaciones existenciales. A través de una trama absurda y empleando a su tropa de típicos actores –con algunos nombres nuevos como Tom Hanks, Margot Robbie y Maya Hawke–, Anderson nos plantea situaciones que hacen converger al arte y a la ciencia en la espiritual experiencia de no entender nada, pero no por ello cesar la búsqueda de propósito. Para quienes no sean ávidos seguidores del director, puede que esta película no encaje en sus sensibilidades. Sin embargo, los fans del cineasta y de su peculiar estilo la amarán. Lee más en nuestra crítica de Asteroid City.
No hace falta decir qué elementos conforman el peculiar estilo del director Wes Anderson, porque con nueve largometrajes previos, este se ha vuelto instantánea y mundialmente reconocible. Con La Crónica Francesa (The French Dispatch) ya no hay que hablar de una madurez, sino de un estancamiento. El décimo largometraje del cineasta texano tiene todos sus sellos distintivos (incluyendo un elenco envidiable dispuesto a hacer acto de presencia por montos de tiempo ridículos), pero sus excentricidades acaban por entorpecer una trama presentada en formato de antología –primera de su filmografía–, una colección de tres artículos que forman la edición final de la publicación ficticia del título. Los fans del director ya sabrán qué esperar y seguramente la disfrutarán, aunque podría no ser la mejor opción para que los neófitos se adentren en su filmografía.
El regreso de Anderson al stop motion fue otro éxito rotundo, nominada como mejor película animada en los Óscar y premiada con el Oso de Plata del Festival de Berlín para el mejor director. Isla de perros es la conmovedora historia de un niño en busca de su mascota, por lo que viaja a una isla de basura a la que todos los perros han sido exiliados.




