Garra de Hierro fue catalogada como "la gran película de Zac Efron". No es para menos: la película, injustamente ignorada por los Oscar, quería llamar la atención del público como el punto de inflexión en la carrera del astro de High School Musical al contar la historia de un luchador de lucha libre que vive bajo una maldición. ¿Película de terror? Casi eso: aquí, forma parte de una familia donde casi todo sale mal. La gente muere inesperadamente, resulta gravemente herida, renuncia a seguir adelante. Garra de Hierro, por lo tanto, es una historia dura, muy emocional y que sorprende por su realismo. El hecho es que con Oscar o sin él, la película es la realización de una buena historia que se cuenta. Puede que le falte el momento climático que tanto promete, pero sigue siendo impactante, bien filmada, aporta buenas ideas y, sobre todo, es un hito en la carrera de Zac Efron, sin recurrir nunca a la exageración o al "anzuelo del Oscar". Es cine sincero, algo que, en tiempos de efectos especiales exagerados y tramas enrevesadas, es un verdadero alivio. Lee más en la crítica completa de Garra de hierro.
Protagonizada por Zac Efron, ‘Desierto de oro’ (‘Gold’) parte de una premisa sencilla, pero interesante: dos hombres encuentran oro en el desierto, pero no pueden extraerlo, así que uno decide quedarse a cuidarlo mientras el otro parte para conseguir el equipo necesario. Sin embargo, conforme pasan los días de soledad en el páramo, enfrentándose a animales, intrusos y condiciones extremas, el hombre comienza a sospechar que ha sido abandonado. Es un thriller psicológico sencillo (como si la secuencia de la clásica ‘Avaricia’, de Erich von Stroheim, hubiera sido adaptada a un largometraje) con un presupuesto modesto, pero con una fenomenal ejecución que Efron logra cargar sobre sus hombros con una gran actuación.
Muy pocas películas ahondan en el retrato de los asesinos —sin ser parte del género slasher— como es el caso, por ejemplo, de ‘Monster’ con Charlize Theron. ‘Ted Bundy: durmiendo con el asesino’ trata de hacer lo mismo pero no termina por funcionar completamente por su ángulo emocional, que cambia el foco entre el asesino (Zac Efron) y su novia (Lily Collins). Efron destaca y demuestra su amplio espectro actoral, aunque su esfuerzo se ve opacado por la irregular ejecución de la cinta, a veces emocionante y a veces meramente sensacionalista. Para un retrato más apegado a la realidad, recomendamos revisar antes ‘Conversaciones con asesinos: Las cintas de Ted Bundy’, que te ayudará a tener un conocimiento más amplio sobre la biografía del asesino.
Esta película tiene una banda sonora excepcional que imprime en su ADN el mejor estilo de Broadway. El gran showman (The Greatest Showman) lo tiene todo: explosión, magia, Hugh Jackman dándolo todo en temas complejos poniendo los pelos de punta y la participación de Benj Pasek y Justin Paul (La la Land) generando una lista de canciones de gran potencia. Para los amantes del género, este es un peliculón.
Durante unas vacaciones de Navidad, los jóvenes Troy y Gabriella (dos adolescentes en principo con pocas cosas en común) se conocen. Ambos descubren su interés mutuo por la música durante un concurso de karaoke, y deciden presentarse al casting del musical del instituto.