Menos, pero mejores: el futuro de las películas originales de Netflix

Ya es bien sabido que Netflix no tuvo el mejor arranque del año: su primer balance financiero de 2022 arrojó una pérdida de 200 mil suscriptores en todo el mundo (por primera vez en una década), razón por la que la compañía de streaming prepara cambios estratégicos, como una modalidad con publicidad y el cobro por contraseñas compartidas.

Al interior de la organización, todas las divisiones se han enfrentado a cambios estructurales (incluyendo el despido de unos 150 empleados). Sin embargo, la división de películas originales de Netflix está al centro de una serie de modificaciones grandes, motivadas por una lógica de costo-beneficio.

De acuerdo a fuentes de The Hollywood Reporter (THR), la nueva estrategia se resume a lo siguiente: “Netflix quiere enfocarse en hacer películas más grandes, películas mejores, y estrenar menos de las que previamente estrenaba a un ritmo ávido”. En este cambio de rumbo, las primeras bajas han sido las divisiones de películas familiares en live action, y la de películas independientes (enfocada en producciones con presupuestos menores a los 30 millones de dólares).

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¿Qué significa esto para las películas originales de Netflix?

De acuerdo al THR, no está del todo claro ni siquiera al interior de la propia Netflix. Sin embargo, fuentes al interior de la compañía concuerdan en que la apuesta será “hacer la mejor versión de una cosa, en vez de abaratarla en aras de la cantidad”.

Eso no quiere decir necesariamente que no habrá más películas “pequeñas”. Pero basta ver los números para notar la clara tendencia: en vez de apostar por cinco películas de 30 millones de dólares cada una, por ejemplo, Netflix optará por una sola de 150 millones. Las “grandes películas evento” son las que atraen suscriptores, según el codirector de la compañía, Ted Sarandos.

¿Cuáles son estas películas? Un ejemplo es El hombre gris (The Gray Man), dirigida por los hermanos Russo (Avengers: Endgame), que se reporta como la película más cara de Netflix a la fecha (con un presupuesto de 200 millones de dólares) y cuyo estreno está previsto para julio.

Otro ejemplo: las dos secuelas de Entre navajas y secretos (Knives Out), del director Rian Johnson, por las que la compañía pagó 469 millones de dólares. El estreno de la primera se espera para finales de 2022.

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Sin embargo, esta estrategia para las películas originales de Netflix contrasta con lo que parece ser el fin de lo que THR señala como “proyectos de vanidad”, citando como ejemplo a El irlandés (The Irishman) de Martin Scorsese, cuyo presupuesto rondó desde los 150 hasta los 250 millones de dólares, según a quién se le pregunte.

“Esta tendencia de hacer lo que sea para atraer talento y darles carta blanca [para hacer lo que quieran] va a desaparecer”, dice un informante del medio. THR señala que seguramente habrá excepciones (“esto es Hollywood, después de todo”).

¿Por qué sí una película de los hermanos Russo, y no una de alguien como Scorsese? Sólo hace falta ver al Top 10 histórico de las películas originales de Netflix más populares para darnos una idea de a qué se refiere Sarandos con “grandes películas evento”.

Al momento de la redacción, ese top histórico es encabezado por Alerta roja y, exceptuando propuestas como El stand de los besos 2 (un romance juvenil), Imperdonable y Bird Box: a ciegas (respectivamente, un drama y un terror con Sandra Bullock) y, curiosamente, la propia El irlandés; todas las películas en la lista son de acción. Algunas de ellas son tan recientes como El proyecto Adam, estrenada apenas el pasado marzo.

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De las 10 películas del top, dos son protagonizadas por Ryan Reynolds, y otras dos por Sandra Bullock. Los nombres de Chris Hemsworth, Dwayne Johnson, Gal Gadot y Mark Wahlberg también están en la mezcla, sin mencionar al elenco coral multiestrellas de No miren arriba, encabezado por Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence.

En resumen, incluso si puede haber excepciones y las propuestas más “pequeñas” no se irán del todo, parece que el futuro de las películas originales de Netflix está en apostar por los blockbusters de acción con star power.

¿Qué pasará con las películas más “pequeñas”?

Es difícil predecir el futuro, pero en lo que respecta a las películas originales de Netflix de menor presupuesto, la tendencia parece ser que, si bien no desaparecerán totalmente, sí veremos que se estrenan muchas menos.

Lo cierto es que no todas las películas estrenadas por la plataforma son producidas por ella, pues muchas de ellas son adquiridas. Películas como la mexicana Roma, por ejemplo, fueron producidas y después vendidas al gigante del streaming, que luego las toma como sus estandartes para la temporada de premios. No sería descabellado que la compañía continuara con estas adquisiciones en adelante, aunque en volumen más moderado, para complementar el catálogo.

Considerando que la legitimidad de un Oscar a Mejor película sigue siendo materia pendiente para Netflix, no sorprendería la compañía adoptara un modelo similar al de los estudios tradicionales para sus estrenos: blockbusters en verano, y películas más pequeñas “de prestigio” en otoño, de cara a la temporada de premios.

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Lo cierto es que los modelos de distribución cambiaron para siempre después de la pandemia, y aún están transformándose. La plataforma MUBI, por ejemplo, fue creada con el modelo de una “cartelera” mensual con curaduría. Hoy, el servicio no sólo mantiene esa cartelera, sino que tiene una librería y experimenta con estrenos limitados en salas de cine.

Plataformas como la propia Apple TV+, por otro lado, siempre funcionaron bajo el esquema de pocos estrenos de cine, apostando por la calidad en vez de la cantidad. Por otro lado, con su poder como estudio cinematográfico, Warner Bros. puede experimentar lo mejor del estreno en cines y en streaming, ofreciendo sus grandes producciones en HBO Max sólo 45 días después de haber estado en pantalla grande.

En otras palabras: los modelos de distribución entre estudios y plataformas siguen fluctuando bastante, pero los hay para todos los gustos. Y lo cierto es que nunca habíamos tenido tantas opciones para ver películas de tantos tipos.

Puede ser que el plan para las películas originales de Netflix no sea lo que a ti te gusta. Y eso está bien. Si ese es el caso, quizá va siendo hora de echar un vistazo a otras plataformas. Como hemos dicho, no hay una sola que sea mejor para todos, pero sin duda podrás encontrar la que sea mejor para ti.